Mi amigo ultrarunner LC Stoute tiene una máxima: "El dolor se mata con mas dolor". Su teoría es que cuando las piernas protestan y se sienten cansadas, es el momento de someterlas a un último esfuerzo para así prepararlas para cuando eso nos pase en una carrera. La palabra que define esta tendencia es "Punishment", o sea, castigo.
Yo soy de la opinión que siguen la mayoría de los runners aficionados, - porque de esto no vivimos -, que hay que escuchar al cuerpo y programar un descanso cuando lo necesitamos. Pero al mismo tiempo sigo la máxima de que "uno compite como entrena", y la única manera de mantener una mejora progresiva sin llegar a estancarse es siempre dar un poquito mas, ese kilómetro extra, esa serie adicional, ese día de descanso que convertimos en una dura jornada de entreno.
Hoy sacando números vi que llevaba 11 días seguidos entrenando, y quitando el sábado que fue precompetitivo y solo hice 30 minutos (adicional a 3 horas de caminata), todos los demás días había superado 1 hora larga de corrida. Realmente esta tarde cuando llegué a la casa sentía las piernas rígidas, sin duda porque con la deshidratación severa que tuve ayer puse mas atención a beber que a realizar los estiramientos como es debido. Así que me tocó poner en una balanza el ser conservador y quedarme en casa escuchando a mi cuerpo, o ser agresivo y hacer totalmente lo contrario, cuando las piernas se quejan, Punishment ! ! !
Decidí lo segundo porque soy consciente de que en pocos meses voy a estar haciendo varios retos de fondo y ultradistancia en los que la musculatura a buen seguro va a llegar a momentos de total agotamiento, y en esos instantes es cuando entrenamientos como el de hoy darán sus frutos. Así que no solo salí a correr, sino que programé un entrenamiento de fuerza subiendo al Cerro El Peñón con 4 series a las propias Antenas repetidoras de TV. Realmente me sentía bien cansado, pero me repetía a mi mismo como un mantra "punishment,...punishment,...". Las subidas fueron de mas rápidas a mas lentas, en 8.28, 8.34, 8.47,...pero en la última me dije "piernas aguanten que voy con todo, un esfuercito mas", y me casqué por primera vez un sub 8 con 7.55 seg. En total fueron 1h30 minutos de entrenamiento y con la convicción de que superando días tan duros y complicados como el de hoy, tengo mucho ganado para el futuro.
Hoy la foto de entrada me la tomé delante del tanque de agua del IDAAN que hay cerca de la casa, 120,000 litros y yo llegando algunos días deshidratado,...ironías de la vida ! ! ! Voy a tener que ponerle un grifo :)
Hasta mañana,
FER
Supongo que mezclando los diferentes puntos de vista sacamos aquello de "entrena cansado, compite descansado". Estoy contigo en que se compite como se entrena.
ResponderEliminarMe das miedo....un abrazo
ResponderEliminar¡Cuidadín Fer! Cuando el cuerpo se queja hay que escuchar... Si no después no vale quejarse.
ResponderEliminarEl secreto además de saber entrenar es saber descansar.
Con todo cariño desde Lugo.
Tu hermano.
Ese tipo de reacciones son las que te hacen mejor corredor, cuando más te duelen las piernas es cuando más aprietas, todo un campeón.
ResponderEliminarApunto la lección.
Los refranes siempre tienen contrarrefranes: "a quien madruga, Dios le ayuda" - "más madrugó, el que la perdió". Así, que quiém sabe quién tendrá razón: descansar o machacarse. Lo que si es seguro es que tienes más fondo que el tanque de agua de la foto.
ResponderEliminarFer, eso del "punishment" no lo conocía, es nuevo para mí, lo tendré en mente!!
ResponderEliminar11 días seguidos...?! siempre te lo diré, estas hecho de otra pasta, y lo curioso es que no vives del running!
Eso, tu hazle el grifo al tanque del IDAAN! jajaja
bss
Tania
joder,eres un autentico machaca como yo .yo pienso tambien asi o al menos pensé asi durante mucho tiempo,ahora entreno pero no soy tan bruto.
ResponderEliminarel dolor con dolor se cura,sin dolor no hay gloria,en el dolor esta el placer,todo esto me repetia una y otra vez cuando me pegaba verdaderas palizas entrenando,claro eso se reflejaba en las competiciones que disputaba.esa misma filosofia aplicaba a las molestias varias que siempre he padecido,entrenaba y entrenaba y acababan desapareciendo,cuando superas el umbral del dolor,te conviertes en una maquina de correr y no piensas en si te vas a lesionar o cosas asi.todo lo que he conseguido ha sido por mi esfuerzo,la genetica no vale si no eres disciplinado y te lo curras a diario."dime como entrenas y te diré como compites".un saludo amigo
Pasaba por aquí y me ha enganchado esa filosofía del "punishment".
ResponderEliminarSeguiré tus andanzas.
también llamado "masoquismo".
ResponderEliminarHola Fer, aprovecho esta oportunidad para saludarte por primera vez.Aquí en canarias tenemos un dicho si te duele no le hagas caso, por eso tenemos los hospitales llenos y una lista de espera de 2 años.
ResponderEliminarPor cierto me han ofrecido a medio plazo la posibilidad de trasladarme con mi familia a Panamá, que tal país es para vivir, perdona mi ignorancia.
Fer, eres de los míos: el dolor se combate con el dolor.
ResponderEliminarA mi me pasa lo mismo, seré que soy masoquista (y de ahi esta primera lesión seguramente): aunque un día esté cansado si está planificado entrenar, salgo igual y todo es empezar, porque luego a medida que pasa el tiempo me encuentro mejor.
Eso creo que es masoquismo, jejeje. El otro día me dejaste loco con tus pulsaciones en reposo. No, si ya lo dijo Jan una vez que los ultrafondistas están hechos de otra pasta. Un saludo compañero y a seguir así.
ResponderEliminarCreo en el "castigo", lo he practicado desde el primer día que empecé a correr y nunca me he arrepentido; cuando por razones que nunca he entendido me he acobardado en alguna que otra ocasión, entonces es cuando la he cagadop con todas las del equipo; suerte y adelante, campeón.
ResponderEliminarComo todo en la vida, el castigo puede ser beneficioso hasta cierto punto. Gran final en tus series por el Cerro El Peñón.
ResponderEliminarPor cierto, cuando vengas por aquí, tienes pensado participar en alguna carrera?
Un saludo.