Hola amig@s,
Os comparto el artículo que publico mensualmente en la sección de Running de la revista SPORTS & HEALTH, correspondiente a la edición de febrero 2011.
Espero os guste y sea de utilidad. Lamentablemente no he conseguido el celular de la modelo de la foto, pero estamos en ello ;) jajaja ! ! !
Saludos,
FER
Os comparto el artículo que publico mensualmente en la sección de Running de la revista SPORTS & HEALTH, correspondiente a la edición de febrero 2011.
Espero os guste y sea de utilidad. Lamentablemente no he conseguido el celular de la modelo de la foto, pero estamos en ello ;) jajaja ! ! !
Saludos,
FER
CORRIENDO EN LA CAMINADORA
Por Fernando Revuelta
Atleta del Team SAUCONY
La Caminadora, también llamada cinta ó tapiz rodante, se ha popularizado en los últimos años en Panamá debido a la proliferación cada vez mas numerosa de gimnasios, no solo comerciales sino también privados en muchos edificios y urbanizaciones. A su éxito ha contribuido el ritmo de vida al que la mayoría de los panameños estamos sometidos, en el que hay poco tiempo para realizar las rutinas de ejercicio y entrenamientos.
Si bien la Caminadora como su propio nombre indica pareciera solo inicialmente indicada para aquellas personas que comienzan una rutina de ejercicios básica, son muchas las personas que después de un tiempo pasan de caminar a trotar suave para luego ir incrementando paulatinamente la velocidad y el volumen de sus entrenamientos.
Entre las ventajas de la Caminadora tenemos la facilidad para ejecutar una rápida sesión de ejercicio físico, incluso con un programa pre-establecido de ritmos, intensidades e inclinación, y todo ello independientemente de la climatología que pueda haber en el exterior. Al ser la superficie de la cinta plana y estable, se facilita la absorción de la pisada minimizando el riesgo de lesiones frente a otros terrenos mas duros como el asfalto o concreto.
A pesar de estas bondades, la caminadora tiene también sus detractores, especialmente aquellos a los que les gusta correr en la naturaleza al aire libre sintiendo la brisa en su rostro. El estar en un ambiente cerrado nos va a provocar una mayor sudoración, por lo que la hidratación deberá de ser regular y abundante.
Es importante que no nos dejemos engañar por los ritmos y velocidades que podamos alcanzar corriendo en la Caminadora, ya que la propia tracción de la máquina trabaja a nuestro favor haciendo más fácil la mecánica de la zancada.
Por lo monótono de la misma, y aunque tengamos un TV enfrente o usemos un aparato de audio, utilizaremos la Caminadora usualmente en periodos cortos no superiores a los 30-45 minutos, mas que nada aquellos días en que la climatología o la falta de tiempo nos impidan realizar otra clase de ejercicio.
En este punto es interesante hacer mención al uso de la Caminadora para el trabajo de series o calidad, lo cual realizan algunos atletas mas experimentados. Correr en la Caminadora no conlleva en si mismo una gran complejidad, pero correr a ritmos altos ya es otra cuestión, y hay que tener un buen equilibrio y dominio a la hora de incrementar y desacelerar la velocidad de modo drástico.
Si optamos por el trabajo de calidad en este aparato, preferiblemente utilizaremos un calzado tipo flat, competitivo, lo que nos va a ayudar a la mecánica del gesto en la impulsión y el apoyo. Obviamente primero trabajaremos a ritmos lentos, para ir calentando y después de unos 10-15 minutos, ya podremos elevar la intensidad del entrenamiento. La ventaja que tendremos frente al trabajo realizado por ejemplo en una pista, es que será la propia máquina la que nos marcará la velocidad que en cada momento busquemos, olvidándonos de esa sensación de incertidumbre y de ir mirando las referencias de paso para ver si vamos o no al ritmo buscado. Desde este punto de vista, se pueden realizar repeticiones y series de modo exacto y preciso a lo que previamente tengamos planificado, sin pecar de quedarnos cortos o pasarnos en el desempeño deseado.
Viéndolo desde este punto de vista la Caminadora pareciera un “camino de rosas” para el trabajo específico, pero también tiene sus espinas correspondientes. Empezando por la propia máquina, ya que para correr a ritmos altos aunque no seamos especialmente pesados se necesita una Caminadora resistente, ya que de otro modo pueden moverse de su posición por el excesivo rebote. Tampoco todas las Caminadoras son idóneas para realizar trabajos de alta intensidad, bien por tener de fábrica una velocidad máxima no suficiente, tener velocidad idónea pero limitada manualmente por los gerentes del establecimiento, tener un tiempo de uso así mismo limitado a 25 o 30 minutos (tras lo cual la máquina se para), tener un sistema no accesible y cómodo para aumento-disminución de velocidad así como parada en caso de emergencia, o estar programada en un sistema de medición diferente al que usamos (millas / km).
Otro tema nada desdeñable es que no existe generalmente en Panamá una cultura de usar la Caminadora para trabajos de alto performance, por lo que los demás usuarios lo miran a uno como a una rara avis que estuviera dañando los equipos, adicional a las molestias que se pueden causar a los vecinos por la alta sudoración que se alcanza, la cual queda regada en muchos casos en toda la máquina y alrededores por mucho que uno use su toalla.
Pero si podemos solventar todos estos inconvenientes, bien porque tenemos una Caminadora propia en casa o bien porque tenemos acceso a un gimnasio en el que las máquinas son adecuadas y están sin restricciones, adicional a un ambiente propicio donde se entiende que sudar en una instalación deportiva debe ser la norma y no la excepción, entonces trabajar intervalos y series en esta superficie es una alternativa muy interesante y viable.