Buenos días amig@s:
Os comparto a continuación mi última colaboración publicada en esta ocasión en la revista SPORTS & HEALTH del mes de mayo 2013, sobre la Temporada de Lluvias.
Aunque lo redacté hace ya mas de un mes, mis palabras sobre el cambio climático y la alteración del patrón en las lluvias parecían premonitorias. Trabajo en el sector energía desde hace 14 años y os pueda asegurar que lo peor ni mucho menos ha llegado. Cada año la demanda en el país está creciendo el equivalente a unos 100 MW, y no hay a corto ni mediano plazo soluciones que puedan paliar este incremento. El que llueva en unos días simplemente va a ser un pequeño parche que salvará la situación por un tiempo, mientras la brecha entre la capacidad instalada de generación en el país, y la creciente demanda de energía, cada vez es menor. Las medidas de ahorro siempre son importantes, pero los cortes de energía programados de varias horas al día llegarán mas temprano que tarde.
En cuanto al artículo, lo podéis ver EN LÍNEA, en las siguientes imágenes, o como texto simple al final de la entrada.
Gracias siempre por vuestro apoyo y comentarios,
FER
TEMPORADA DE LLUVIAS
Desconozco
si se trata del fenómeno del Niño o que sucede estos últimos años con el clima
en Panamá, pero definitivamente que la temporada de verano asociada
tradicionalmente a los meses de diciembre, enero y febrero, se va paulatinamente
retrasando.
Una
de las costumbres que tengo es la de llevar un cuaderno de entrenamientos
diario donde detallo las diferentes sesiones y circunstancias de referencia. Y
entre estas últimas, siempre dejo constancia de la hora del día y las condiciones
meteorológicas, incluyendo la ocurrencia o no de lluvia.
No
se me olvida que el día que organizamos la primera edición de la carrera
SANTA´S RACE nos llovió toda la mañana horrible, algo inusual y tardío para un
23 de diciembre. Igual o mas de extraordinario es que desde esas fechas no
tenido ningún entrenamiento bajo lluvia, y cuando escribo estas líneas estamos
ya en la primera quincena de abril.
Pero
de seguro las lluvias llegarán, no se preocupen, y en muchas ocasiones serán verdaderas
trombas tropicales, como si alguien estuviera arrojando cubos de agua desde el
cielo. Así que debemos estar prevenidos y adoptar ciertas rutinas que nos
pueden evitar mas de un resfriado.
MIRANDO AL CIELO
Aunque
la meteorología no es una ciencia exacta, es muy fácil y accesible el consultar
las previsiones del clima en internet, especialmente si se trata de un anticipo
de tiempo menor a 24 horas. Eso nos puede ayudar a adelantar o postergar
algunas de nuestras sesiones, sobre todo aquellas de fondo de mayor duración. Estadísticamente,
la ocurrencia de lluvia al menos en la capital y alrededores, es mas frecuente
en horas del mediodía y comienzo de la tarde que en el resto de la jornada.
Programar nuestros entrenos temprano en la mañana nos puede asegurar un buen porcentaje
de sesiones sin la presencia del líquido elemento. Al menos esa es mi
costumbre, y desde la que puse en práctica, pocos días me sorprende el agua
mientras corro.
MEJOR PREVENIR
Si
somos de los que salimos antes del amanecer a realizar nuestras rutinas,
generalmente no podremos mirar al cielo de noche y descubrir si está cubierto o
no de nubes para elegir la ropa que vamos a llevar. Como prevención, y salvo
que se trate de rodajes cortos, siempre llevo un impermeable plástico con
capucha conmigo. Doblado convenientemente, un impermeable deportivo ocupa muy
poco espacio, es muy liviano, y lo podemos meter dentro de un bolsillo o
sencillamente ajustado en la parte baja de la espalda con la goma del short o
licra dejando colgando una punta. Es un sistema muy sencillo y con un poco de
práctica lo haremos convenientemente para que se mueva lo mínimo. Si cae una
lluvia muy liviana, realmente no es necesario ponerse un impermeable porque con
las altas temperaturas algo de agua siempre es refrescante y se agradece. Pero
si sentimos que se va a tratar de una lluvia fuerte y constante, sin detener
nuestro entrenamiento nos lo podemos colocar muy rápido, sin cerrar hasta arriba
la cremallera para facilitar la transpiración.
TRUENOS Y RELÁMPAGOS
Correr
bajo la lluvia al menos de manera ocasional puede ser hasta romántico y
placentero para algunos runners, pero esta situación cambia cuando va
acompañada de una tormenta eléctrica. Entrenando por el área de Las Cumbres mas
de una vez he visto como un cielo aparentemente despejado se ha puesto en
cuestión de 5 minutos totalmente oscuro, y han empezado a caer rayos a mi alrededor.
Sinceramente se pasa miedo, ya que un corredor es muy vulnerable ante la
presencia de descargas eléctricas. La recomendación es terminar el
entrenamiento y buscar refugio bajo techo sin demora, alejándose de las áreas
mas descubiertas donde podamos ser un blanco fácil. El refugiarse debajo de
árboles u otras estructuras que puedan semejar un pararrayos es una pésima idea
pues casi todos los accidentes suceden de este modo.
RÁPIDO A LA DUCHA
Si
por cualquier motivo la lluvia nos sorprende entrenando y terminamos húmedos,
es muy importante quitarnos cuanto antes la vestimenta y zapatillas mojadas, y
ponernos ropa seca. Si tenemos la posibilidad de tomar una ducha caliente
rápido es lo ideal, pero caso contrario y si nos tenemos que trasladar por
ejemplo hasta la casa, nos sentiremos por mientras mas confortables. La mejor
manera de ganarse un resfriado es quedarse húmedo a la intemperie sometido a
una fuerte brisa, o aunque sea bajo techo en aire acondicionado. Tomar frutas
ricas en vitamina C o grajeas con este compuesto de manera habitual, ayudarán
también a que los virus no lo tengan tan sencillo a la hora de atacar nuestro
organismo.
Nos
vemos en la Ruta?
tripi y su boliita mágica :D
ResponderEliminar"Pelaiito"