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08 octubre 2010

GAMBOA, CON AGUA Y MEDALLA

Hola de nuevo amigos,

"Con Agua y Medalla". Si, ese era el lema de la prueba en la que competí el pasado domingo, los 21km de GAMBOA, prueba organizada como en anteriores ocasiones por el CLUB DE CORREDORES DEL ISTMO.

Esta carrera, en sus distintas denominaciones a través de los años, como Media-maratón de Summit, la Summit-Gamboa, los 21km Fiestas Patrias y afines, es sin duda una de las pruebas atléticas con mayor tradición e historial de las locales. Conforme a la investigación realizada por Enrique Vergel, la primera edición de esta prueba se remonta al año 1976, por lo que es una de las decanas del calendario. Esto anterior y el hecho de que por un periodo de tiempo se estuvo corriendo en dos ocasiones por año (en el primero y último cuatrimestres), da como resultado que según la data existente en el 2011 se estará celebrando la edición de Aniversario #50 de la prueba, ahí es nada ! ! !

Si bien esta prueba de Gamboa siempre ha sido de gran aceptación entre los atletas locales, en la edición pasada había tenido ciertos problemas y carencias en algunas áreas, principalmente en hidratación durante la prueba y el avituallamiento en meta. Esto dejó un mal sabor de boca, y generó un fuerte debate con críticas al organizador. Como suele suceder criticar es muy fácil, pero no es lo mismo aportar soluciones y ponerse al frente a "tirar del carro". Esto es precisamente lo que hizo César Kiamco, atleta con basta experiencia y muy apreciado en la comunidad runner. No solo identificó los problemas habidos, sino que se ofreció para asumir la responsabilidad de ser el nuevo Race Director de la prueba. Con meses de trabajo por delante, armó un nutrido y experimentado equipo con personas de su confianza, teniendo como objetivo dar un nuevo impulso y visión a esta prueba.


Soy de los que piensan que los grandes eventos en muchas ocasiones son un rotundo éxito o fracaso total dependiendo de pequeños detalles. Y son precisamente esos pequeños detalles, a los que muchas veces no se les presta la debida atención, los que se cuidaron con mimo en esta oportunidad.

Comenzando por la ruta, se buscó volver al sentido tradicional de la carrera durante muchos años, con orientación Gamboa-Summit-Gamboa, en vez de Summit-Gamboa-Summit. Algunos se preguntarán en que cambia eso el recorrido de la prueba, y la respuesta es que el poblado de Gamboa está prácticamente a nivel del Canal de Panamá, mientras que el área de Summit está mas elevado. Ello supone que este año la primera mitad de la carrera sería ganando altura, y la segunda teóricamente mas rápida al ser en su mayoría descenso.

Otro de los nuevos elementos fue que para favorecer la logística se logró interesar al Hotel Gamboa Rainforest Resort para que la prueba tuviera su salida y meta en sus predios, lo que sin duda ayudó al desarrollo de la misma y la seguridad de participantes y público en general.

Las inscripciones se abrieron con mucha antelación en diferentes almacenes y tiendas, y se agotaron un par de días antes del evento. Ello facilitó el control de los organizadores y cuantificar con tiempo los requerimientos necesarios de hidratación, insumos, voluntarios, y demás para la prueba. Los días en los que uno llegaba en Panamá a una carrera media hora antes, pagaba y corría parece van a ser historia pasada no tardando mucho, al menos en eventos importantes en los que no se puede estar improvisando. La comunidad atlética poco a poco va tomando finalmente conciencia de que para exigir a los Organizadores, adicional a pagar la inscripción también hay que poner un poco de interés y de compromiso.

Días antes del evento los Organizadores celebraron una multitudinaria rueda de prensa para medios y patrocinadores, en la que se hizo el lanzamiento oficial de la prueba. Allí estuvimos algunos de los atletas registrados para la carrera y como ganadores de anteriores ediciones la Organización nos reconoció públicamente, lo cual siempre es de agradecer.

En lo personal esta media-maratón de Gamboa siempre ha sido de mis preferidas del calendario local, siendo este año la quinta ocasión en que iba a participar. El poder correr en medio del bosque húmedo tropical, rodeado de exhuberante vegetación, paralelos al propio Canal de Panamá, cruzando el muy particular spot del puente de Gamboa, escuchando de fondo toda clase de fauna e incluso con suerte viéndola cruzar por los arcenes, es algo realmente impresionante. Esta prueba tiene un potencial enorme, y vista ya la difusión que se le ha dado el presente año, no me cabe ninguna duda de que se va a convertir en uno de los destinos preferidos de muchos atletas del área incluyendo a corredores de USA y otras latitudes.

Acudía a la prueba con poco entrenamiento, tanto en lo referido a la cantidad de kilómetros como a la calidad de los mismos, por lo que era muy escéptico sobre mis posibilidades. Sabía que la elevada premiación económica iba a movilizar a la mayoría de los fondistas locales, así que mi objetivo primario de estar en el top-ten se antojaba realmente a priori una quimera. Mas asequible se presentaba el subir al podio de mi categoría Master (40-49 años), habida cuenta de que los 2 mejores representantes en dicha edad y compañeros de mi team Fernando Blanco y Simón Alvarado no eran de la partida por diversos compromisos: Blanco participando ese mismo día en una Media-maratón en el área de Medellín (Colombia), y Simón en capilla de la Maratón de Chicago donde estará participando este próximo domingo.

Por fortuna el día amaneció fresco, medio nublado, y antes de las 6.00 am en plena oscuridad mi esposa Lisette ya me estaba llevando hasta el área de la partida junto al Hotel Gamboa. En la categoría individual estábamos inscritos 230 atletas, y adicional se celebraban relevos de 3x7 km, que aportaban así mismo mas de 50 equipos. La salida estaba prevista a las 6.30 am, muy temprano supongo para la hora que se acostumbra en Europa, pero incluso ya un poco tarde para lo habitual en estas latitudes donde el sol siempre calienta fuerte. Mientras estiraba coincidí con algunos de los favoritos, los cuales llevábamos dorsales de privilegio otorgados por la organización, otro detalle que agradecer. Así el vencedor de la última edición Agustín Alcazar portaba el 01, yo el 02, Jorge Castelblanco a la postre ganador el 03, Teresín Avila el 04, Perea el 05, Nelson Piedra el 06, César Muñoz el 07, etc. Por marcas de la temporada, yo partía con el sexto mejor registro del año, así que en teoría tenía opciones aún no estando en un buen momento de forma de mantenerme en la pelea.

Puntualmente se dio la salida, y no se si por deferencia hacia nuestros bibs de privilegio o por respeto, la gente se colocó bastante bien en esta ocasión, no obstaculizando la salida en busca de las cámaras y poniéndose en el lugar mas lógico según su desempeño esperado. Desde el primer metro el gran favorito Jorge Castelblanco no quiso esperar. Castelblanco venía de ganar los 21kms Asics y los 15km Powerade de Clayton, y era obvio que con su estado de forma saldría a buscar no solo la victoria sino un buen registro de tiempo. Nada mas salir nos enfrentábamos con un corto pero exigente repecho, que ya nos puso la respiración jadeante y en fila de a uno tras los pasos de Castelblanco. La prueba se cortó de una vez y cada cual tomó ya casi el lugar que salvo contadas excepciones finalmente le correspondió en meta. Detrás de Castelblanco se quedó Alzacar, tras el César Muñoz, después Teresín Avila, y durante un par de kilómetros un cuarteto con Nelson Piedra, Guillermo Ramírez, José Santana y el que suscribe.

Fue espectacular correr por debajo del Paseo de los Bambúes del Hotel Gamboa en dirección al puente vehicular. Los Bambúes, que en realidad son una especie de hierba y de ahí su enorme flexibilidad, alcanzan una enorme altitud en esta zona y realmente forman como un túnel vegetal por debajo del cual uno corre. Con la brisa y el viento, los bambúes se mecen y crujen desgarradoramente, pareciendo que van a saltar rotos en mil pedazos cayendo sobre uno, pero todo es una ilusión pues son como cañas de pescar gigantes que nunca quiebran.

Cruzando el puente vehicular sobre el Lago Gamboa, que solo tiene un carril por lo que hay semáforos para ordenar el tráfico alterno en uno y otro sentido, Piedra aceleró el ritmo y de nuestro cuarteto inicial se descolgó el vallero Santana, reciente ganador hace poco mas de un mes del Valle Trail Maraton. Desde este puente vehicular hay unas vistas alucinantes del propio Canal de Panama, ya que se corre a su nivel, e incluso se puede ver pasar a un par de metros el histórico ferrocaril que une Colón con Ciudad de Panamá, haciendo vibrar y traquear enormemente toda la estructura de metal y madera del vetusto puente.

Así que nos quedamos Piedra, Ramírez y yo en los puestos 5º, 6º y 7º, ya perdiendo metros con la punta pero a su vez haciendo diferencia con los perseguidores. A ambos los conozco muy bien y hemos competido en numerosas pruebas juntos, incluso haciendo equipo. Ramírez, que es uno de los fondistas históricos locales tiene en su palmarés haber ganado la Maratón de Panamá, y al igual que yo es de categoría master, mientras que Piedra está a punto de entrar en la citada división a sus 39 años. Coincidencia también, los tres sabemos que es ganar en esta prueba, ya que Piedra se alzó con la victoria absoluta en 2002, Ramírez en 2005 y 2006, y yo en las ediciones del 2001 y 2003.

Después del puente vehicular la ruta de ida tiene 5 ascensos hasta Summit, no fuertes en pendiente pero si sostenidos de los que hacen daño a la larga cuando se van sumando uno tras otro. Tras superar el primero a la altura del Centro El Renacer, vi que Piedra se nos fue unos metros por delante y Ramírez a su vez me llevaba agitado, así que sabedor de lo que todavía faltaba pensé que era mejor no fundirme y me puse a mi propio ritmo.

En esta oportunidad el tema de hidratación se tuvo muy en cuenta. Cada 2 kms se organizó un puesto de asistencia con sus respectivas toldas, neveras de hielo, y bien surtidos con suficiente agua y bebidas energéticas. Los mismos estaban a cargo de diversos grupos y teams de running y triatlon, por lo que adicional a la propia asistencia, los ánimos eran frecuentes al ser los voluntarios también corredores, familiares de corredores y gente del ámbito deportivo que conocen y viven apasionadamente estos temas.

La prueba en el plano competitivo no tuvo muchas incidencias realmente. Desde Castelblanco que iba en la punta hasta yo en el 7º puesto íbamos en solitario de 1 en 1, separados unos de otros cada vez por mayor diferencia. Como yo no soy de mirar nunca para atrás (es algo que no me gusta, es como si me descentrara de mi objetivo de seguir corriendo hacia adelante), no sabía como venía la carrera por detrás. Así llegamos al km 7 donde estaba la estación de los relevos, con mucho público y corredores de los diferentes equipos. Allí tuve un percance que me pudo sacar de la carrera. En la curva previa antes de la larga subida al Red Tank iba tan ceñido a la cuerda de la carretera que desde un carro que se había estacionado fuera en la grama abrieron la puerta de golpe y me dí un fuerte encontronazo en todo el lateral derecho del cuerpo. En el momento no pude mas que saltar de la impresión, parar un poco y darme masajes rápidos en el exterior de la rodilla. Por momentos pensé "se acabó, estoy fuera de la carrera", pero no se si por la adrenalina del momento o la concentración que tenía volví a retomar el paso sin aparentes molestias. Horas después de terminar se me puso un fuerte dolor en el lateral de la cadera, y en el antebrazo un hematoma rosado de consideración pues se ve que esa zona es la que paró mayormente el golpe. Tengo que decir que fue un accidente totalmente fortuito, y de hecho los dueños del carro me identificaron y se disculparon una vez terminada la prueba. Pienso que ellos se llevaron mas susto que yo en el momento,...debieron pensar "upsss,...nos lo hemos cargado" :)

Llegando al km 8 superé el puesto de hidratación donde estaba reunido el Team Simon y los amigos de Running Balboa. El propio Simón me entregó bebida isotónica y todos me dieron ánimos y vítores. Muchisimas gracias, de verdad que en esos momentos se agradece enormemente el apoyo y la ayuda. Superada la última loma previa al Parque Summit y en pleno descenso me crucé con el primer clasificado que venía ya retornando, Jorge Castelblanco. Le di unos cuantos gritos de ánimo, y la verdad es que él contaba ya con una enorme ventaja sobre el resto de competidores. Así me fui cruzando de 1 en 1 con el resto de mis predecesores, hasta llegar al punto de retorno de mitad de carrera en 7ª posición provisional, segundo de la master, y tiempo parcial de 41.03 (nota: el retorno a meta lo hice en 41.59).

Di la vuelta en los conos y entonces vi por primera vez como venían las cosas por detrás. Siempre uno confía en llevar la máxima ventaja y que de venir alguien cerca no sean de los rivales directos. En contra de lo esperado, vi un grupo compacto de 4 atletas que venían relativamente cerca, y luego si ya una distancia muy grande sin nadie a la vista. En este cuarteto venían dos masters mas, José Santana y Leonel Rodríguez, adicional al chorrerano Román Avila y el triatleta Alfredo Trujano. Por instantes me vinieron malos pensamientos, en el sentido de que si me venía abajo y me alcanzaba el cuarteto en el retorno podría perder todo lo ganado hasta el momento, quedando fuera por los pelos tanto del top-ten como del podio master. De nuevo en la estación de asistencia de Running Balboa al km 12 me dieron ánimos y retomé la concentración y confianza. Aumenté la amplitud y cadencia de la zancada, y así fueron pasando los kilómetros mientras la situación de carrera se mantenía sin cambios. Llegando al km 17 si me apercibí de que iba recortando mucha diferencia con un corredor puntero al que por su uniforme identifiqué como Teresín Avila, amigo y compañero en el Team Simon.

Superado el último ascenso la prueba ya era en su mayoría con pendiente favorable, así que tocó apretar los dientes y confiar con que el grupo perseguidor se hubiera descompuesto, ya que generalmente varios corredores organizados pueden alternarse y marcar un ritmo mas rápido y uniforme que si van en solitario. De ser una mancha amarilla en el horizonte, Teresín Avila se fue haciendo cada vez mas visible y a la entrada del puente de Gamboa ya me puse a tiro de piedra de su estela, aunque no estaba yo tampoco como para muchas alegrías ni cambios de ritmo. Cruzamos de nuevo por el Paseo de los Bambúes y entramos en el último kilómetro de la prueba. Justo en ese momento nos topamos con el último repecho de subida, el número 11 de todos los que tuvimos que ascender durante el recorrido, y ya las fuerzas estaban bajo mínimos. Al mismo tiempo que yo alcanzaba a Teresín noté pisadas detrás mío y por primera vez en toda la prueba miré de reojo hacía atrás. Reconocí enseguida a Gustavo Román Avila, - sexto el año pasado en esta misma prueba -, por lo que a falta de solo 500 metros para meta nos juntamos los tres a la espera de la definición final.

Aunque no estaban en mi categoría, yo soy de los que piensa que cualquier puesto aunque sea absoluto cuenta, así que cuando Román Avila atacó me fuí tras él, y ya en la recta de llegada le cambié el ritmo pudiendo superarlo y alcanzar la 6ª plaza final. El sprint no fue nada ortodoxo ni digno de un velocista, pero para un "viejito" como yo creo que hice mi mejor esfuerzo. Aunque el tiempo fue discreto con 1h23-02, y obtuve el peor puesto de mis 5 participaciones (tenía 2 primeros y 2 cuartos), terminé muy satisfecho ya que pude sacar adelante una prueba que en teoría tenía pero que muy complicada.

Por lo tanto sumé un nuevo top-ten, el número 16 de la temporada, y tocó de nuevo podio en la categoría master, esta vez segundo por detrás de Guillermo Ramírez que entró delante de mi en la quinta posición absoluta.

La asistencia a la llegada fue como en todos los demás aspectos modélica, con un buen desayuno e hidratación para retomar las fuerzas,....y su correspondiente medalla ! ! ! El único aspecto que la Organización no pudo controlar fue el clima, y la lluvia apareció al momento de la entrega de premios afectando algo el protocolo pero sin deslucir lo que fue una auténtica fiesta deportiva.



Mesa principal durante la rueda de prensa que se celebró días antes del evento (Foto propia)



Junto a Simón Alvarado escuchando atentos las normas y reglamentos de participación (Foto propia)



La organización tuvo la gentileza de hacer un reconocimiento a los vencedores absolutos de las últimas ediciones, por lo que me citaron como doble ganador de la prueba



Se reservaron números de privilegio para las mejores marcas de la temporada. Los bibs comenzaron en el 201, el cual fue para el ganador del año pasado Agustín Alcazar, y la organización me asignó el 202. Se agradece el detalle. El 203 lo llevó el ganador de la prueba de este año Jorge Castelblanco.



Imagen del Canal de Panamá a la altura del Lago Gamboa, con un barco transitando dirección Colón.



Caminando hacia la partida con Fernando Toledo y Olivier Romero (Foto Fondismo)



Conversando con Irving Rompy Bennett minutos antes de la salida (Foto Trois)



Ya en el corral de salida, segundos antes del comienzo del evento (Foto Dick de León)



Nelson Piedra encabezando nuestro "efímero" grupo de 4, por el km 1 de la carrera, en el conocido como Paseo de los Bambúes (Foto Trois)



Correr en medio de esta belleza no tiene precio (Foto Trois)



Nuestro grupo de 4 entrando al puente de Gamboa, el cual tiene un firme muy irregular (Foto Birria Panama)



El cuarteto ya convertio en trío saliendo del puente, con Nelson Piedra, Guillermo Ramírez, y yo. El vallero José Santana unos metros ya descolgado (Foto Fondismo)



En el km 8 recibiendo los ánimos del puesto de hidratación de Running Balboa y Team Simón. Al fondo el grupo perseguidor. Muchas gracias a Simón y resto del team por todo el apoyo (Foto Fondismo)



A la altura del Canopy Tower, oliendo ya el punto de retorno (Foto Fondismo)



Preciosa imagen del puntero Jorge Castelblanco ya de regreso, en la estación de relevos del km 14 (Foto Dick de Leon)



Subiendo la dura loma del Red Tank (Foto Fondismo)



Mi estrategia de supervivencia, subir las lomas con pasos cortos y rápidos, y aumentar la zancada en los descensos (Foto Fondismo)



De espaldas a punto de pasar por la estación de relevos del km 14 (Foto Martín HHH)



Jorge Castelblanco, merecido ganador de la prueba de punta a punta con 1h10 (Foto Corredores del Istmo)



Un sprint nada ortodoxo pero efectivo :) (Foto Panama Sports)



6º puesto final con Román Avila al fondo (Foto Birria Panama)


Se acabó ! ! ! (Foto Birria Panama)



Con mi amiga ultrafondista Margaret Von Saenger, en esta oportunidad metida a tareas organizativas (Foto Birria Panama)



Ya cambiado y recuperado, con una buena sonrisa (Foto Fondismo)



Recibiendo el 2º premio de la categoría master del race Director César Kiamco, junto a Guillermo Ramírez y Leonel Rodríguez



La verdad que terminé muy satisfecho (Foto Panama Sports)



Adicional al premio económico, nos entregaron unas placas super bonitas

CLASIFICACIONES

Fotos de TROIS.COM.PA
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Reseñas de PRENSA

En el capítulo de agradecimientos, mil gracias para todos aquellos que me animaron durante la ruta con sus gritos de "Ale Fer", "Vamos Tripi" y similares, así como toda la gente que me ha felicitado estos días por e-mail, facebook, teléfono, etc. A la Organización, encabezada por César Kiamco, gracias también por todo el trabajo y dedicación que hizo de esta prueba un evento a un altísimo nivel, digno de estar entre los mas prestigiosos del área Centro y latinoamericana. De seguro y con estos antecedentes, en el 2011 haré todo lo posible por estar de nuevo con mi bib en la linea de salida y disfrutar de una magnífica prueba en un marco natural e histórico únicos.

Por último, gracias por las fotos que ilustran la entrada a Enrique Vergel de FONDISMO, Dick de León, Trois.com.pa, Birria Panama, Panama Sports Magazine, y Club de Corredores del Istmo.

Y la próxima??? Muy pronto, el Tripi no para :)

Abrazos,

FER

12 comentarios :

  1. Gran FER......ENHOABUENA una vez más no paras de carrera en carrera y de podium en podium....vaya media maratón tan fascinante que relatas en tu magnífica crónica como nos tienes habituados....ya veo que cuentas de todo..me llama la atención lo de la organización y sus fallos.......yo me voy a poner de parte de ellos ya que pienso que no hacen las cosas para mal.....tienen que haber fallos que a veces no son muy grandes pero ahí estamos nosotros en gemeral para hacerlo si cabe peor..en más de tirar del carro como tú bien dices y aportar en positivo y no casi siempre hacer de nada una montaña......en caunto a tu carrerón por ese lugar único una pasasda como siempre se nota que vives cada km y que disfrutas desde el pricipio al final con un sprint espectacular y novedoso...jjeje....hoy tengo yo carrera ya que es festivo en la comunidad valenciana y voy a imitar con tu permiso el sprint fianl del gran FER PANAMÁ mi favorito por allá..te mando saludos,un abrazo y que sigas así de fuerte e ilusionado con todo lo que haces,kiko.

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  2. Que grande Fer, ya me gustaría a mí soñar con tus "discretos" tiempos.

    Felicidades

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  3. Salisteis desde el principio con el cuchillo entre los dientes, hacer la carrera prácticamente en solitario se debe hacer duro, pero para estar falta de entreno es una carrera genial. Enhorabuena

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  4. Enhorabuena por ese carrerón y por seguir cosechando éxistos.
    Un saludo.

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  5. Lo tengo decidido..!! Viendo tus crónicas y todo el ambiente que tenéis en Panamá, voy a pedir un traslado laboral para ser co-partícipe de esos eventos deportivos tan interesantes... Felicidades por ese nuevo Top-Ten...!!!

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  6. Felicidades pedazo de carrera que cuentas. Lo de la puerta del coche vaya susto, menos mal que quedo en nada, y te permitio acabar con ese tiempo discreto???

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  7. Excelente crónica Fer!!! y mi sincera enhorabuena por este carrerón!!! me imagino que la casa la tienes a tope con tantas medallas, me imagino que Lisette se encarga de todo jejeje
    Me alegro mucho que en la madre patria el running este en aumento, definitivamente que los tiempos cambian y para mejor!
    Un fuerte abrazo,
    bss
    Tania

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  8. Espectacular carrera y crónica. Espero que te sentara bien beberte la medalla y colgarte el agua del cuello, ¿o no era así? :)

    Como dice Miguel, hacer una carrera a ese ritmo y casi solo, ha de ser durísimo, física y mentalmente. Admirable.

    Impagable la escena de los bambúes crujiendo.

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  9. Que buena carrera, otra vez más... Se me acaban los elogios. Y las fotos son espectaculares.

    Un fuerte abrazo

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  10. ¡Pero qué grande eres , brother! Y qué bonito es ver que pasan los años y que vamos formando parte de la historia de las pruebas (unos más que otros, es cierto). Recuperate pronto y a ver cuándo te dejas caer por la madre patria, que tenemos pendiente una maratón juntos -el 17 de abril queremos hacer la de Cracovia, y los 101 peregrinos serán el 30- ¿es demasiado soñar de nuevo con correrlas?

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  11. Amigo Fer, eres un crack, me gusta como entrenas, me gusta como corres, me gusta como escribes las cronicas, me gustan las fotos, me gusta todo! un pequeño sueño seria concerte en persona y pasar un buen rato corriendo codo con codo por algun trillo si puede ser...
    Bueno me ha encantado la entrada! felicidades por TODO !

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  12. Fer gran crónica, desde luego se nos van acabando los adjetivos para evaluar tus carreras.
    Eres muy grande y te mantienes siempre en esos puestos de privilegio.
    Un fuerte abrazo

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